Yo quiero morir
como lo que soy, como semental fogoso, salvando el congal del coso
Un congal donde suspirar, y coger hasta caer fulminado, con Una vulva en
la boca y ensartada en la verga otra.
En mi última hora y con las mesalinas de mi locura en mis
dientes
cantare las perlas oscuras, de mis poemas calientes
cantare las perlas oscuras, de mis poemas calientes
Finare con las magas lascivas, que dejaron en mi aliento,
el aroma de su fruta prohibida.
- Recito sonriente, mientras con su mano elevaba el vaso de güisqui hacia sus labios, con un guiño en sus ojos y un beso al viento termino diciendo:
Yo te contare los sueños de mi vida, y penetrare en ti en el
silencio de la noche ¡Imagina amor que habré soñado!
Ella le escuchaba sin pestañear y le miraba embelesada,
mientras sus manos sinuosamente se acercaban por debajo de la mesa a sus muslos.
Y en ese preciso instante la llegada del camarero a la mesa rompió el sueño de
la menterotica caliente Paula, al escuchar :
¿ qué va a tomar?
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